Hola amigos,
Quiero compartir con vosotros mi experiencia en el Campobosco 2018, de Valladolid a Turín, bajo el lema “Iremos a medias”. Hemos participado más de 700 jóvenes de todas las comunidades, de varias nacionalidades y con muchas ganas y sentimientos por descubrir en torno a Don Bosco y su legado, desde sus orígenes hasta cada una de nuestras realidades.
Ya desde el inicio del viaje fuimos ganando amistades, conociéndonos como intensos compañeros de viaje e intercambiando nuestras vivencias como animadores, cooperadores, religiosos/as… que nos iban acercando al espíritu salesiano.
Nuestro punto de encuentro fue Barcelona, formando el grupo más numeroso, distribuyéndonos en grupos de trabajo para facilitar las distintas actividades que desde la fe y el compromiso personal compartíamos. Todos estábamos mezclados y todos éramos uno en torno a la figura de Don Bosco. Visitamos todos los lugares emblemáticos y significativos para la familia salesiana con Don Bosco, Domingo Savio, María Mazzarello…
Me agradó lo bien cuidado y conservado que nos lo mostraron. Me gustaría resaltar el buen ambiente, la sensibilidad, la cercanía y el buen hacer de todos y cada uno de los que participamos. Me quedo con el “espíritu latente” en cada momento de familia, de juventud, de ilusión, de renovar nuevas energías en nuestra parroquia y casa de juventud, porque la magia de Don Bosco va con cada uno de nosotros desde Turín, y en mi caso, hasta Valladolid.
Un abrazo y os dejo una pequeña muestra de esta inolvidable experiencia en imágenes.